Siempre es buen momento para plantearse nuevos negocios: el emprendimiento no descansa. Pero para montar una empresa de éxito son necesarios tiempo, energía, recursos, formarse, informarse y prepararse bien.
¿Tienes el gusanillo emprendedor?
Si tienes el “gusanillo emprendedor”, sabes de lo que te hablo. Ese runrún interior, esa inquietud, esas nuevas ideas que nos rondan y nos impulsan a crear o a intentar mejorar algo…
Y si esto del “gusanillo emprendedor” no te resuena, existen unas cuantas motivaciones más para emprender. Así, por ejemplo, son muchos los profesionales que cuentan con las competencias técnicas, la experiencia y a veces incluso con el dinero suficiente para arrancar su propio negocio, y tienen el propósito de llevar a cabo de forma diferente y mejor la actividad que ya realizan por cuenta ajena. También hay personas que, tras la pérdida de un empleo o la dificultad para encontrarlo, se ven impulsadas a buscar una salida profesional a través de la creación de una empresa propia, en un sector que dominan o incluso en otro hasta el momento inexplorado, en el que piensan haber detectado alguna oportunidad.
No tomes a la ligera la decisión de emprender
Sea como sea, si has tomado o vas a tomar la decisión de emprender, vas a embarcarte en una aventura vital realmente apasionante. Aunque, eso sí, emprender es una decisión que no hay que tomar a la ligera, ya que va a requerir tiempo, energía y recursos. En mi experiencia de más de 20 años emprendiendo y ayudando a emprender – mediante formación, mentoring y las Guías Prácticas Plan de Negocio publicadas para la revista Emprendedores -, siempre recomiendo encarecidamente trabajar a fondo el modelo de negocio, investigar, informarse, formarse y en general prepararse bien antes de emprender.
Claves del éxito…o del fracaso de un negocio
A continuación destaco las que, en mi experiencia, son las principales claves del éxito…o del fracaso de una nueva empresa.
-
Definir y validar el Modelo de Negocio
Antes de poner en marcha cualquier actividad empresarial, es necesario trabajar en el modelo de negocio: qué propósito tenemos, qué queremos y qué no estamos dispuestos a hacer, de qué forma, para quién, con qué objetivos, con qué y con quién, etc. En esta fase se suele utilizar el modelo Canvas para ir plasmando el modelo de negocio de forma visual y dinámica. Es necesario testar y validar las hipótesis de partida y, en general, investigar el mercado y el sector antes de acometer inversiones importantes. Con el feedback recibido, se avanzará progresivamente en la construcción del modelo de negocio, que finalmente dará paso a su planificación. Confiar únicamente en la intuición y confundir las características del mercado con los gustos y necesidades propios es muy peligroso en los negocios.
-
Marketing y Venta
Saber comunicar y vender es imprescindible para el éxito de cualquier negocio. Los clientes no van a llegar espontáneamente y es en los primeros tiempos de la empresa cuando hay que volcarse en darla a conocer de la forma más amplia y por supuesto más eficaz posible. Que una empresa despegue y prospere dependerá en buena parte de nuestra actitud comercial, de nuestra habilidad para convencer, ilusionar y generar confianza, a través de acertadas estrategias de marketing.
-
Equipo y Socios
Nuestros colaboradores son los mayores responsables de la calidad del servicio al cliente. Lograr un buen ambiente de trabajo, la motivación, satisfacción laboral y el compromiso de nuestro equipo es una tarea ardua, pero imprescindible para el éxito. A los eventuales socios hay que escogerlos con sumo cuidado y es muy recomendable, antes de empezar a rodar, redactar un Pacto de Socios, un documento que regula las relaciones con los socios, para evitar conflictos futuros.
-
Financiación
El plan de negocio nos define cuánto dinero necesitamos para hacer frente a las inversiones iniciales y a las acciones previstas en nuestra primera etapa. Aun así, habrá que tener en cuenta aspectos impredecibles, que pueden ocasionar baches de tesorería. De no disponer de un plan de contingencia, causarán problemas. Es importante buscar la manera de empezar la empresa de forma un tanto holgada y prever accesos eventuales a créditos, para que la situación financiera no nos estrangule. Y por supuesto es necesario conocer en todo momento la salud financiera de la empresa, vigilando el cashflow.
-
Formación
Invertir en formación siempre es recomendable, tanto sectorial como empresarial, siendo imprescindible dominar por lo menos los conceptos básicos del marketing y de las finanzas. Asimismo, uno de nuestros objetivos en el tiempo debería ser convertirnos en expertos reputados de nuestro sector de actividad y eso se consigue a través de una constante actualización.
-
Innovación
Para que nuestra empresa sea exitosa no basta con realizar un buen trabajo. Para asegurarnos unas ventajas competitivas en el tiempo, es necesario saber innovar. La innovación permite crear valor para el cliente constantemente, a lo largo del tiempo. No se trata únicamente de innovación tecnológica, sino que se debe innovar también en los modelos de gestión, en las políticas de recursos humanos, en el desarrollo diario de nuestro trabajo, permitiéndose experimentar y apostar por la novedad.
7. Espíritu emprendedor
No pretendo trazar un retrato tipo de la persona emprendedora. Sin embargo, es innegable que, siendo el motor de la empresa, posea o deba adquirir determinadas características, tales como resiliencia, capacidad de trabajar duramente, habilidades sociales y de comunicación, iniciativa, creatividad, empatía, entre otras. Si además le mueve un propósito fundamentado en valores y la pasión por lo que hace, el cocktail es perfecto.
8. Propósito
No subestimes el poder del propósito para el éxito de tu nueva empresa. El propósito define el motivo y la visión a largo plazo del negocio. Va más allá de las ganancias y se centra en el impacto en la sociedad y en los valores. Guía buena parte de las decisiones, atrae y conecta con personas afines, inspira al equipo y fomenta su compromiso.
9. Plan de negocio
La planificación del negocio es muy importante. Aun así, solamente una pequeña parte de los emprendedores cuentan con un plan de negocio. Muchos de los que no lo tienen naufragan al cabo de unos meses ante dificultades esperables, pero que no habían tenido en cuenta.
Elaborar un plan de negocio es una experiencia empresarial extraordinaria, que implica una reflexión profunda sobre el negocio en su globalidad. Requiere concretar, poniendo por escrito, los aspectos principales de todas las áreas de la empresa (marketing, equipo humano, finanzas, trámites, fiscalidad, administración, organización del trabajo, etc.), definiendo objetivos, estrategias, acciones, tiempos, recursos, previsiones de ingresos y gastos, etc. El plan de negocio es la herramienta estratégica de planificación de la empresa que se pretende poner en marcha, para asegurarte que tu idea de negocio sea viable. Sin contar que el plan de negocio es la tarjeta de presentación y el requisito imprescindible para negociar con bancos, inversores, solicitar ayudas y subvenciones e incluso prevenir futuros malentendidos con los socios.
¿Cuándo hay que hacer el plan de negocio? Una vez validado y definido el modelo de negocio, es el momento excelente para planificar por escrito los detalles de la actividad en el plan de negocio, dando respuesta a interrogantes de todo tipo y estableciendo la manera de proceder.
También hay que recordar que el plan de negocio no es un “corsé asfixiante”. Por supuesto se le irán aportando modificaciones en función de los resultados que se vayan obteniendo y de las necesidades o problemas que surjan. Pero sigue siendo un punto de partida muy recomendable para empezar una nueva actividad.
El Libro 30 Planes de Negocio
Como vemos, a emprendedores y emprendedoras no les espera un camino fácil – eso sí, extremadamente apasionante – y es necesario ponderar bien y tomarse muy en serio la decisión de emprender. En nuestro propósito de ayudar a hacer realidad el sueño de crear una empresa propia, minimizando el riesgo que conlleva, desde Emprendedores hemos lanzado el libro 30 planes de negocio. Si deseas emprender un nuevo negocio o buscas ideas y oportunidades sobre las que construir y planificar una futura actividad por cuenta propia, esta selección de 30 artículos/plan de negocio representativos de varios sectores puede inspirarte y ayudarte.
¿No está la actividad que quieres emprender? También puedes utilizarlos como modelo para estructurar tu trabajo de investigación previo antes de lanzarte. En cada artículo se presentan: la situación del sector, el panorama competitivo, las claves para el éxito, el marketing, el equipo humano, los trámites, las recomendaciones de expertos y profesionales del sector y un supuesto económico-financiero con los números más relevantes de la actividad. En definitiva, unos “mini” planes de negocio sobre los que edificar tu propio plan de negocio.
El Libro estará en los kioscos con la revista Emprendedores de Julio/Agosto y pronto también en formato PDF en la web de la revista. Si quieres que te avise cuando esté disponible en la web, será un placer, tan solo tienes que comentarlo aquí o escríbeme a ayudandoaemprender@silviamazzoli.com.
¿Hacemos planes en común?
Termino comentando que tenemos grandes planes para ayudar a los emprendedores a hacer realidad sus sueños, formando e informando para minimizar los riesgos. Y queremos aunar fuerzas para crear los mejores recursos que ayuden a emprender, también en otros canales y formatos.
Para ello buscamos:
-Profesionales, expertos, expertas en sectores y actividades
-Empresas con productos y servicios que aporten valor y soluciones a emprendedores, en general o en un sector concreto.
Si estás interesado, interesada, escríbeme a ayudandoaemprender@silviamazzoli.com.
Gracias y ¡Buena lectura!
Deja un comentario